Pues como ya comenté en mi último post de eventos se acercaba un
viajecito con un grupo a Andorra. La verdad es que pintaba muy bien porque hace unos años estuve con el mismo grupo en
Lisboa y el Hotel que eligieron era una pasada. Ahora tocaba saber con que sorprenderían a sus invitados...

El grupo era de una empresa llamada
Sapec Agro que hace fertilizantes y abonos para la agricultura y todos los años invitan a sus mejores distribuidores para poner al día de los avances de producto.
Esta vez tuve la suerte de poder compartir evento con una chica de
Yeti con la que no había tenido la suerte de compartir una salida,
Vanesa, o mas conocida como
Vania!

Hemos descubierto sus dotes en la fotografía y prueba de ello es lo bien que me ha sacado en esta foto...

El director de evento era
Gonzalo que a pesar de todo siempre estuvo muy tranquilo, incluso cuando la nieve nos llegaba por encima de la rodilla.

El martes salíamos de camino a Andorra, en mi caso en el maravilloso AVE de camino a
Lérida donde nos esperaba un bus que nos llevaría hasta Andorra la Bella donde estaba el impresionante Hotel. Después de un par de vueltas y algún que otro problemilla con las cuestas llegamos a un hotel de los que quitan el hipo.


La verdad es que nunca estuve en un Hotel así con la montaña cerca. Se llama Andorra
Park y para conseguir encender las luces de la habitación hay que hacer un cursillo acelerado. Y lo mismo para conseguir averiguar como funcionaba aquella ducha, me faltó poco para llamar a Recepción... No tuve la suerte de poder probar aquella bañera con mando a distancia, luz bajo el agua, repleta de difusores de burbujas, y desde la que levantabas una persiana que te permitía ver las vistas de la montaña nevada.

Poco después de llegar nos fuimos a cenar a un Restaurante llamado el
Refugi (que buen ojo tiene
Vania, y eso que ni había estado allí!) en el que nos pusieron una carne y una
Fondu de queso impresionante. Pero lo mejor estaba por llegar con el postre...


Poco a poco comenzó a nevar y hablábamos de lo bonito que es levantarse y ver todo nevado... Pues dicho y hecho, a la mañana siguiente había mas de un palmo de nieve en Andorra la Bella y todo era precioso. Esta era la vista desde la habitación.

Ese día el grupo iba a estar reunido todo el día y menos mal porque Andorra se colapso con una de las mayores nevadas de los últimos años. A medio día el palmo de nieve se había convertido en medio metro! La nieve seguía dejando imágenes preciosas pero ya empezaba a no ser tan divertida.

Al día siguiente teníamos actividades en la estación de esquí de
Pas de la Casa donde nos esperaban Trineos tirados por perros, motos de nieve... y daba la sensación que el plan del día siguiente se iba a chafar.

Además esa noche íbamos a una borda a cenar y los buses que nos tenían que llevar que venían de La
Seu (España) no les dejaban entrar, así que no había forma de sacar al grupo del hotel. Cuando conseguimos buses que nos llevaran no había forma de que subieran hasta el hotel porque había una cuesta muy pronunciada así que tuvimos que bajar a los clientes entre montículos de nieve.

Muchos no llevaban calzado adecuado y tuvimos que ayudar a bajar a mas de uno cogido del brazo para que no bajase rodando por la cuesta. Esta era la estampa de la salida del Hotel antes de la cena...


Los buses iban con cadenas y por
fin conseguimos llegar al Restaurante tradicional de Andorra que se llaman Bordas, en nuestro caso era la Borda
Esteve, que además era preciosa, y que como era de esperar nos
dio de cenar a todo lujo.


Tras la cena teníamos concertadas unas copas en uno de los lugares mas de moda de Andorra, El
Buda. La nevada había sido tan grande que el
Buda no abrió, las calles
estaban desiertas y nos tocó improvisar y buscar otro lugar donde tomar algo.

Y como no podía ser menos
Yeti consiguió un lugar chulo para unas 45 personas que pensábamos que querrían tomar algo, pero cual fue nuestra
sorpresa cuando solo se bajaron 4 clientes...
Regresamos pronto al hotel porque al día siguiente habíamos conseguido proponer otra actividad alternativa a la de los perros y las motos de nieve ya que las estaciones de esquí habían sido desalojadas por riesgo de aludes.

A la mañana siguiente
fuimos a Caldea, un balneario enorme en el que algunos pudieron disfrutar de un baño calentito al aire libre rodeado de nieve en mitad de un valle flanqueado por enormes montañas pintadas de blanco.


La verdad es que me hubiera encantado apuntarme pero esta vez andaba un poco "
pasadito" de comidas copiosas y el estómago andaba protestando. Y es que no se puede ir de evento con
Gonzalo, es un experto en comidas y quien se resiste a disfrutar de un buen vino, una buena carne, un buen postre...
Tras el baño en Caldea regresamos en bus a
Lerida y AVE para Madrid.
Nos quedamos con las ganas de las motos de nieve, los trineos porque además la sierra tenía que ser un espectáculo y pensaba
hincharme a hacer fotos, pero el viaje fue genial!
Nos vemos pronto
Gon y
Vania (la chica no se lo monta nada mal, a los dos días se fue a
Mexico de vacaciones...)